22 enero 2017

La culpa de todo la tiene un tal Antonio

Apuesto a que ya pensabais que no iba a retomar esto jamás.  


La vuelta al cole ha sido muy dolorosa, pero no tanto como torta que me pegué contra el suelo del pasillo.
Aparte del esguince en el tobillo también me hice daño en un brazo (todavía me duele), un muestrario de moratones (ahora "amarillones") y una hernia de orgullo.  
Pero lo peor era el atasco.
Adiós. 

No, espera, no era eso.
P*t* autocorrector...

A Dios pongo por testigo que no entiendo qué F*CK*NG F*CK*D F*CK le pasa a las tuberías de este edificio (y colindantes). Llevamos apenas cinco años viviendo aquí y si contáramos las capas de pintura como si fueran anillos de un árbol parecería que llevamos un siglo. 
Aunque para ser justos algunas no se corresponden con obras sino con los vómitos masivos de Nena-chan, pero no vamos a entrar en detalles sin importancia. 
Que acabo de comer. 
Como decía antes de pasarme dos semanas con el brazo pocho, era 31 de diciembre y teníamos un atasco, y la mala costumbre de ducharnos al menos una vez al año. Ya sabéis, en año nuevo. 
LO NORMAL. 
ZaraJota echó líquido desatascador y nada, 
Metió una guía y nada. 
Dijo palabrotas y nada. 
Los días pasaban y pasaban y el atasco cada vez iba a peor, tanto que para ducharme (ya sabéis, año nuevo) tenía que abrir el grifo, mojar una parte del cuerpo, cerrar el grifo, esperar que el desagüe tragara, enjabonar, esperar que el desagüe tragara, aclarar, dejar que... Bueno, ya os hacéis una idea. 
El único que estaba feliz con la situación era Bebé-kun, que en cuanto nos despistábamos se iba a chapotear en agua sucia... y eso cuando no se la bebía, que la leche del biberón le da mucho asco, pero el agua de segunda mano ya si tal. 
En fin, que viendo que aquello no se solucionaba terminamos llamando a nuestro fontanero de confianza, al que llamamos así porque viene a casa con tanta frecuencia que al final le hemos dado una llave.
El fontanero estuvo toda la tarde tumbado en el suelo de nuestro baño, enseñando la hucha y emitiendo gruñidos y al final tuvo su veredicto: 
-Esto va a ser comunitario. 
ZaraJota y yo respiramos aliviados porque de pronto el atasco se había convertido en El Problema de Otro. 
-Bueno, pues nada, avisamos a la comunidad y que envíen un desatasco y...
-No, no, va a haber que picar. Pero no os preocupéis. Como mucho serán una par de paredes del baño, y probablemente el suelo. 
-O sea, todo el baño. 
-Jajaja, no, mujer, todo el baño no. No creo que haga falta quitar el plato de ducha. 
A mí me entraron unos sudores fríos intermitentes con probabilidad de chubasco a media tarde. 
-Es que... es que... no hace ni un año que nos reformaron el baño entero...
-Los atascos son así. Bueno, voy a hablar con el administrador para que me autorice la obra y mañana llamo a Antonio. 
-Vale. 
Todos los fontaneros que pasan por mi casa se empeñan en llamar a un tal Antonio, y no sé para qué, porque luego siempre terminan llamando a ZaraJota, que para mí que el tal Antonio es mas inútil que la última rebanada del pan de molde, pero bueno. 
El fontanero se fue y yo me senté en mitad del pasillo a llorar. 
Los niños lo hacen continuamente, y oye, ahora entiendo por qué: el pasillo tiene una cierta cualidad reconfortante. 
Lloré porque estoy muy cansada, 
y lloré porque estoy harta de vivir en una obra permanente, 
y lloré porque me esfuerzo para que los niños lleven una vida medio normal y no hay manera,
y sobre todo lloré porque últimamente ando medio deprimida y cualquier excusa es buena, para que nos vamos a engañar. 
Estaba disfrutando a lo grande de mi berrinche cuando me interrumpió ZaraJota, que es que no tiene respeto por el dolor ajeno, si lo llego a saber me caso con el tal Antonio, que debe ser muy apañao porque si no los fontaneros no le llamarían tanto, digo yo. 
-Lorz -me dijo-, me acabo de duchar. 
-Guay, hasta el año que viene. 
-No es eso, es que de pronto el desagüe va perfectamente. 
-No me jodas. 
-Ya sabes que no, Bebé-kun tiene el sueño muy ligero. Pero volviendo al tema del atasco, ha desaparecido por completo, voy a llamar al fontanero para que no venga mañana. 
-¿Ves? Ese es nuestro problema: NOSOTROS llamamos a los fontaneros. Deberíamos hacer como el tal Antonio, que deja que los fontaneros le llamen A ÉL. Por eso le respetan...
ZaraJota llamó al fontanero. 
-Hola, le llamo para decirle que el atasco ha desaparecido de pronto. 
-¿Ah, sí? Pues eso debe ser que lo he arreglado yo sin darme cuenta. Son 50 €. 
Jo, pues si llega a darse cuenta nos cruje. 



11 comentarios:

Genín dijo...

Espero que no le pagarais ni un duro, tendrá cara el tío...
Pues yo también ando de atasco sin diagnóstico aún...
Para mi que debe de ser un bicho que ha palmao en el desagüe, voy a esperar un poco a ver si se pudre y afloja... :)
Besos y salud

viñu dijo...

Vale, atasco, de momento solucionado, pero lo de andar deprimidilla, eso si que no me gusta. A plantar fuerte Lorz.

Necio Hutopo dijo...

A mi que lo arregló Antonio

Paloma dijo...

Deprimidilla?! Jooo!! Animo Lorzagirl, al final siempre se acaba viendo la luz!

Mi Álter Ego dijo...

Qué morro le echan, madre del amor hermoso... Un besote y arriba el ánimo!!

Anónimo dijo...

Ánimo con la depre. Tómate todo el tiempo que necesites para lloriquear y echar el moco, estás en tu derecho!! Y en cuanto tengas tres minutos sueltos,enciérrate en algún armario y olvídate de las obras, la familia, el trabajo y lo que sea. Tú eres más importante que todo lo que te rodea,y va súper en serio. Un besazo de una fan :*

Fonsoelegido dijo...

Menos mal que se arregló sólo. A ver si Antonio va a tener poderes místicos.
Ánimo con el bajón y que se pase pronto

Maribel dijo...

Qué suerte... un atasco que se arregla solo... lo que daría yo por un atasco que se arregla solo!!!

Ánimo mujer, que la vida son dos días y no vale la pena amargarse uno y medio. A mi me va muy bien relativizar.

Un beso!

Anónimo dijo...

Animo Lorz!!!!!
Un buen berrinche de vez en cuando no está mal, pero muy de vez en cuando, mejor una partida de parchís aunque sea rápida.
Besos Porras.
PD: Me encantó tu libro, para cuando la peli? ;))

Nuria dijo...

Tu fontanero de confianza??? espero que no sea el que te arregló el baño, y que se hizo la cirugía estética para despistaros...

Ojalá se haya solucionado del todo y no vuelvan los problemas (que al final, igual son culpa del fontanero de tu vecino, fíjatétú lo que se m'ha ocurrío).

Lo de llorar en el pasillo... bueno, un poquitirrín para desfogarte está bien, pero no te acostumbres, que una mujerona como tú no se puede dejar llevar por la depre.
A no ser que lloraras por la hucha del fontanero, que a mí, cuando me enseñan la hucha, también me entran ganas de lagrimeo.

Y aprovecha, aprovecha la ducha mientras funcione...



Un besazo, guapa.

Rob Nobody dijo...

Animo Lorz! De deprimirse nada! Busca remedio: copeo con las amigas, comprate un capricho tonto (la pelota de yoga no vale), ves a risoterapia... lo que sea pero el animo arriba!!